miércoles, 16 de enero de 2013


No me toreéis por favor

 
Como todos sabéis, los toros siempre están de moda. Sobre todo cuando hay fiestas patronales. Toros embolaos, toros enmaromados, ensangrentados y toreros a punto de asesinar a un animal indefenso que apenas se merece el perdón de Dios. El toro es un animal sagrado e indefenso que no hace daño a nadie si no le atacan antes o capta un movimiento de lona. Uno de los mitos es que les atraiga el color rojo. En realidad es así, ellos no pueden ver los colores, todo lo ve negro. Por eso solo puede captar el movimiento (sea un objeto o persona).

Mi pregunta es: ¿Por qué la gente les gusta ver torear? Algunos dicen que es un arte, otros dicen que es una salvajada, y otros porque es “típical Spain”. ¿En qué puesto estás tú?

Yo lo tengo claro, estoy a favor del toro y en contra del torero.

El torero es un gran señor. Vive bien, come bien pero mata a un animal para la diversión de los demás.

Unos de los 10 mandamientos dice: No matarás. Dios sabe castigar a todo el mundo, y así lo consiguen los toros, embistiéndoles.

Más que una profesión es un asesinato. ¿No tendrían que detenerles a esos criminales por matar un animal? ¿Por qué no se hace justicia? Una cosa es matar por diversión y otra es el ciclo alimenticio de la vida, que se aprovecha del toro todo lo que se puede por necesidad alimentaria.

El toro tiene sentimientos, igual que la persona, así que dejémonos de bobadas y disfruten de una vida sana.

 

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